Cuando comenzó el rompimiento de la
tierra para el inicio de la construcción de la ruta 160 en septiembre de 2010, dijimos:…. ¡¡ Uuuff al
finnnn …!!
Hoy,
está excelente, maravilloso, moderno, pero… nada amistoso… a que se refiere
este concepto? Juzgue Ud.,
Cuando
la ruta se autorizó para uso público, nos
alegramos por lo expedito que estaba quedando y lo excelente en cuanto a
rapidez para llegar a destino.
Pero…
Por qué siempre tiene que haber un…
pero?…
Por qué a
todo le encontramos algo que no nos gusta?..
Por qué siempre le buscamos algo malo.
Por qué nos cuesta aceptar algo sin que le busquemos
la quinta pata al gato? No es un invento, ni hablar sin base. Cada uno sabe, cuantas veces ha cuestionado algo, sea del nivel que sea.
Cuando
se habilitó parte de la ruta 160 hace mas de un año, nos alegró mucho porque eso significaba; Viaje expedito. Llegada
rápida al punto. Al fin doble vía. Supuestas menos curvas. Un camino más directo… al menos
eso se dijo antes del inicio.
Sin
embargo, no todo es color de rosa, porque precisamente eso es lo que falta ahora.
El color a la rosa.
El camino -hoy convertido en lo soñado tantas
veces en cuanto a doble vías se refiere- carece de vida o armonía con el
usuario, quien debería estar siempre en unión con la naturaleza.
Y,
cómo es eso?... muy simple… ahora parece ser tu enemigo y no compañero. No
lo ves así?... analízalo, -tal vez ya lo has hecho- y te distes cuenta que se ha convertido en una ruta mas peligrosa que segura.
Alguien dijo por ahí, que
era un verdadero tobogán, con eso ya puedes imaginártelo. Lo que obviamente te induce
a correr y arriesgar tu vida, la de tu
compañero, tus hijos(as) e incluso, la familia entera.
Cosa contraria sucede con el animal, que si corre… se salva y
tu… ¡No!.
Te
hace sentir prisionero, comprimido, sin salida a diferencia de otras más espaciosas con alternativas laterales.
Ya no existe ese camino cuyos árboles bordeaban tu ruta de día y de noche, en
la que muchas veces tuviste que detenerte para comprar en algún negocio de la
carretera y tomar un café o, que el conductor
pudiera bajarse para… descansar o tomar
una foto etc.
Ahora
te sientes ahogado y prisionero de un muro frío que ataja tu libertad. No
puedes desviar el auto a un descanso,
cerrar los ojos y aliviar ese cansancio inesperado
y si tienes algún percance con el auto ahí estas “frito”. Es imposible bajarse
a hacer algún trámite o compra porque al lado tienes un paredón, que más que
resguardarte, pone en peligro tu vida y la de tu familia, un raspón y… ya puedes imaginarlo.
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Como
menos lo puede hacer ese agricultor que cruzó toda su vida el mismo sector con
sus animales y ahora lo hace por paso sobre nivel.
Entonces, eso significa que…habría sido mejor
quedarse como estábamos?. Seguir respetándonos
y sintiendo que somos personas y no máquinas programadas.?. Demás está decir, cómo muchos se convierten al volante, se enfrentan a insultos, otros a golpes, los
gigantones arrinconando al pequeño, los atropellos, las carreras desenfrenadas
y así se siguen sumando comportamientos
insensatos.
En
fin… somos unos eternos inconformistas… que falta para llenar el gusto plenamente?
…
Habrá
que dedicar tiempo a analizar cual será la mejor manera de hacer las
cosas o solo hay que;… llenar los bolsillos de dinero y votos.
Por : Patricia Carrillo Matamala
Por : Patricia Carrillo Matamala
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