Una Pequeña Granja
en Los Álamos.
Hacen tres meses que Xenia ha comenzado a armar su pequeña y acogedora casita, la que hemos
llamado la pequeña casa en la pradera porque se percibe tal sensación, la de estar en una
pradera. Y es que está emplazada en el centro de un gran sitio rodeado de árboles, en la calle principal de
Los Álamos y a una cuadra de la plaza, sin
embargo pareciera estar en pleno campo.
Lo que nos ha sorprendido, es el avance que ha logrado en
tan poco tiempo y ya en estos primeros pasos, podríamos hablar de una pequeña
granja. Hemos visitado este sábado 15 de noviembre 2014, a lo que hemos visto
nacer y nos ha impresionado cómo en tan poco tiempo ha logrado desarrollar un jardín, un huerto y un zoológico.
Xenia, dice que todo ello es algo que ha soñado siempre,
porque le encantan los animales, pero además, está pensado para recibir los
frutos que todo ello otorga y que se ha
propuesto desde que tuvo la posibilidad y
autorización de edificar en terreno de sus padres, como por ejemplo, los resultados
del huerto en las hortalizas, en su jardín plantas ornamentales y flores
para adornar su entorno. Una enorme variedad de cactus y suculentas que adornan la terraza y en el interior, una
gama de kalanchoes de distintos colores.
Como si esto fuera poco, está formando un granero en el que tiene, gallinas, gallos y pollos para
extraer los huevos y preparar los ricos queques y postres. Los patos para
el rico asado,… o no...??
Los conejos para mascota
o... -escabechado que siempre está en la mente del comedor de conejos y que
ella no va a saber- los hermosos cuyes, simples
y angora y el infaltable perro y gato.
Pero todo no ha sido felicidad, porque lo malo siempre
está presente en toda historia, y como dicen que el “hombre tiene un día bueno
y uno malo”…de todo lo bueno, aquí está lo malo. Claro porque, un día temprano en la mañana…se les escapó una
tortuga… lo pueden creer?...¡Una tortuga…!
Cuando Diego lo supo… soltó la carcajada repitiendo...¡ Una Tortuga!...
Su compañera, de tristeza murió al segundo día… no lo podíamos
creer como fuese posible, se les haya escapado una Tortuga¿…? Sin embargo, ocurrió en esta pequeña granja
alameña, cuyos dueños, -Xenia y Leamsi- no pudieron alcanzar y nunca más vieron ni
siquiera su caparazón.
1 comment:
muy buena historia es la segunda que leo y me pareció muy buena y ciertas cosas divertidas y al igual que diego tuve la misma reacción cuando leí el párrafo que se les escapo la tortuga, estas cosas solo le pasan a ellos al parecer..
Muy buen blog felicidades.
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